Qué difícil es escribir cuando el equipo ha mostrado una imagen pésima en el terreno de juego. Era una jornada en la que el Cartagena se jugaba mucho. Se jugaba el ponerse segundo en la clasificación y el vencerle a un Albacete que desembarcaba en la ciudad portuaria con más de mil aficionados. En cambio, los efesistas no terminaban de animarse y las gradas del Municipal Cartagonova se quedaban a medio llenar. Se comenzaba con una clara e importante desventaja, el jugador número 12.

El esférico empezó a rodar y el Albacete controlaba el choque. No se veían claras oportunidades por parte de los pupilos de Tevenet mientras que los manchegos estaban bien posicionados, controlando el balón y no dejando que los blanquinegros avanzaran más allá del medio campo. Muy flojos en relación con los de Sampedro.

Avanzaban los minutos en el marcador y el Cartagena reaccionaba por momentos pero no terminaba de despertar de la siesta. Marcos Rodríguez era el que, sin mucho desparpajo, presionaba y corría pero no se terminaban de espabilar. Junto a Carlos David, eran los únicos que se mostraban luchadores en la medular.

Con una jugada muy bien iniciada en el campo del Cartagena, Jorge Díaz llegaba hasta Limones, que se lucía evitando el primer gol por parte de los visitantes. La defensa blanquinegra pecaba de inseguridad, con muchas dudas. Por su parte, Riau remataba pero su disparo se iba fuera. Las ocasiones, escasas ocasiones no terminaban de cuajar. El partido no iba a ningún lado, la afición no reaccionaba a los cánticos y el ambiente no era el que, durante la semana, se esperaba por las redes sociales.

El árbitro decretaba penalti a favor del Albacete tras el lanzamiento de una falta y expulsión de Tarantino por doble amarilla. Sí, de Tarantino. El mismo que, por decisión del míster, había dejado fuera a Astrain. Lo que es la vida. Hacía tres meses que no jugaba y cuando lo hace, acaba expulsado. Ahora sí que había que remontar y hacer la épica con uno menos en el terreno de juego.

La segunda parte iba a ser crucial para el Cartagena pero el peligro lo seguía llevando el equipo manchego. Los minutos seguían corriendo, que no los jugadores, y sólo la ruidosa afición del Albacete animaba a la del Efesé porque con un nuevo córner llegó el segundo gol de los visitantes.

Con este resultado y la derrota frente a La Hoya se dice casi adiós al primer puesto. El Cartagena ha mostrado una muy mala imagen, no ha sacado el balón, jugaban a pelotazos y no sabían aprovechar las escasas jugadas que hacían. Por su parte, el Albacete se beneficiaba de los espacios y no dejaban de crear peligro por las bandas. O los jugadores cambian de mentalidad y de actitud para el próximo fin de semana o esto termina cuesta abajo y sin frenos.